Desde Casaseca pensamos que la conservación de las dehesas pasa, necesariamente, por asegurarles una rentabilidad mínima

La dehesa es un bosque y ecosistema con una gran biodiversidad que encontramos en el oeste de la Península Ibérica. Su superficie está poblada mayoritariamente por especies del género quercus (encinas, alcornoques, robles, quejigos, etc.) cuyo fruto es la bellota.

Es todo un ejemplo de agricultura/ganadería sostenible. En ellas, hombre y animales, aprovechan con una alta eficiencia, y con el mayor de los respetos al medio, los recursos naturales que en ella se producen.

La dehesa

La dehesa

Conjuga una pobre actividad económica agrícola con una importante actividad económica forestal y ganadera.

Las largas extremidades y condiciones genéticas del cerdo ibérico permiten su completa adaptación a las condiciones de la dehesa. En ella comparte espacio con caballos, ovejas, toros de lidia o toros bravos, vacas y terneros, entre otros animales.

La extracción de madera y corcho es otra de sus fuentes de riqueza.